¿Qué hacer en momentos de angustia?

La angustia es una emoción que todos experimentamos en algún momento de nuestras vidas. Puede ser causada por problemas financieros, problemas de salud, relaciones tensas o situaciones de estrés en el trabajo. Sin embargo, la buena noticia es que la Biblia nos ofrece consuelo y aliento en tiempos de angustia.

Aquí hay algunas cosas que puedes hacer según la Biblia para lidiar con la angustia:

1. Busca la paz de Dios. La Biblia nos dice que la paz de Dios, que supera todo entendimiento, guardará nuestros corazones y nuestras mentes en Cristo Jesús (Filipenses 4:7). Busca la paz de Dios a través de la oración y la meditación en su Palabra.
2. Confía en el Señor. La Biblia nos dice que «Dios es nuestro refugio y fortaleza, nuestra ayuda segura en momentos de angustia» (Salmo 46:1). Confía en el Señor y en su plan para tu vida. Él tiene un propósito y un plan para ti, incluso en tiempos de angustia.
3. Busca consuelo en la comunidad cristiana. La Biblia nos dice que debemos «consolarnos unos a otros y edificarnos mutuamente» (1 Tesalonicenses 5:11). Busca a tus hermanos y hermanas en Cristo para orar contigo y apoyarte en tiempos de angustia.
4. Aprende a perdonar. La Biblia nos dice que debemos perdonar a aquellos que nos han ofendido, así como Cristo nos perdonó (Efesios 4:32). El perdón puede liberarnos de la amargura y el resentimiento, y ayudarnos a superar la angustia.
5. Agradece a Dios. La Biblia nos dice que demos gracias a Dios en todas las circunstancias (1 Tesalonicenses 5:18). Aunque puede ser difícil en momentos de angustia, trata de encontrar cosas por las cuales estar agradecido y alaba a Dios por ellas.
6. Practica la humildad. La Biblia nos dice que Dios resiste a los orgullosos, pero da gracia a los humildes (1 Pedro 5:5). Practica la humildad al reconocer que no tienes el control de todas las situaciones y que necesitas la ayuda de Dios para superar la angustia.

En resumen, la Biblia nos ofrece consuelo y aliento en tiempos de angustia. Busca la paz de Dios, confía en el Señor, busca consuelo en la comunidad cristiana, aprende a perdonar, agradece a Dios y practica la humildad. Recuerda que Dios está contigo y te ayudará a superar la angustia.